Simular estar enfermo, sería explicable por alguna motivación especial. Los simples simuladores pueden desear la hospitalización ocasionándose síntomas para tener algún tipo de compensación, dinero, indemnizaciones, escapar de la policía o tener donde descansar. En este caso, los objetivos son claros y estas personas pueden parar cuando ya no necesitan simular. En cambio, el Síndrome de Munchausen se caracteriza por inventarse dolencias o provocárselas a sí mismo, sin otra finalidad que llamar la atención de los médicos y ser tratado como un enfermo. Se los ha llamado también “vagabundos de hospital”, “adictos al hospital”, “simuladores metabólicos”.
Enfermedades agudas,dolor abdominal, náuseas y vómitos, mareos, pérdida de conciencia, erupciones , abscesos, fiebre, hemorragias por ingestión de anticoagulantes, uso de drogas con el propósito de producir síntomas que sugieran un trastorno mental, estimulantes para producir inquietud o insomnio, otras, para ocasionar alucinaciones, hipnóticos para provocar disminución del nivel de conciencia, simular signos de enfermedad agregando sangre a su orina o heces, administrarse eméticos o laxantes para simular vómitos o diarrea, infectar las vías intravenosas etc.
Las hospitalizaciones múltiples conducen frecuentemente a trastornos físicos como la formación de cicatrices debidos a intervenciones quirúrgicas innecesarias .Es muy difícil diagnosticar este síndrome pero hay ciertas características comunes, como por ejemplo no tener empleo fijo, escasos lazos familiares y sociales, conocimiento excesivo de la terminología médica y rutinas hospitalarias, múltiples intervenciones terapéuticas, historia intensa de viajes, pocos o ningún visitante durante la hospitalización y curso clínico fluctuante con aparición de nuevos síntomas una vez que se han descartado enfermedades.
Puede presentarse en forma de abuso infantil en el cual un adulto provoca o hace fingir las enfermedades a un niño que está bajo su control, frecuentemente hijos o sobrinos.
Entre los factores predisponentes se encuentran los antecedentes de trastornos físicos en la niñez, tratamientos médicos prolongados, varias hospitalizaciones, trastorno de la personalidad.